Mucho se ha hablado y debatido del tiempo “adecuado” que debe durar una relación sexual. Incluso se le ha dado una gran importancia al tema de alcanzar el orgasmo a la vez. Y es que, por mucho que nos enseñen las películas lo “ideal” y lo “fácil” que es llegar al orgasmo con total sincronización, incluso con alguien al que acabas de conocer unas horas antes, en la vida real nos damos cuenta que de fácil tiene más bien poco, de hecho, incluso con una pareja estable y un alto conocimiento sexual el uno del otro, es realmente complicado llegar al clímax a la vez.
Para tratar de conseguir que esto sea posible, debe de existir una comunicación continua durante toda la relación para conocer y equiparar la excitación que se va sintiendo pero, lo verdaderamente importante, y aunque suene a tópico, es tratar de disfrutar durante todo el camino sin estar pensando únicamente en la meta.
Volviendo al tema de la “duración perfecta”, estudios recientes concluyen que la media deseada se sitúa entre 7 y 13 minutos aproximadamente. Por debajo de los 7 minutos para algunos se consideraría breve un tiempo inferior a 3 minutos y adecuado entre los 3 y los 7, mientras que los coitos superiores a 13 minutos se valorarían como prolongados.
Sin embargo, a pesar de lo que puedan decir los estudios, hay que tener en cuenta que existen muchos factores que pueden influir en el tiempo dedicado a la relación sexual. Por ejemplo, no se puede comparar el tiempo dedicado a un intenso pero rápido “aquí te pillo, aquí te mato”, que el tiempo que podemos dedicarle a la relación sexual un sábado por la noche en casa. Tampoco es comparable el sexo que puedas tener con tu pareja al que puedes tener con una persona a la que apenas conoces. Al igual que tampoco es comparable si se han consumido sustancias que puedan afectar al deseo sexual, si se ha tenido un mal día en el trabajo o si por ejemplo comparas el primer encuentro sexual con el que hace cuatro en un mismo día… Por tanto, teniendo en cuenta estos y otros muchos factores, la duración perfecta en el sexo la marca pareja, el momento, el lugar y el deseo que se tenga, por lo que disfrutando de la relación sexual y de lo que ella nos proporciona, encontraremos la duración perfecta en cada ocasión.